Las
memorias que habitas
No
encuentran consuelo
La
palabra tampoco es suficiente
Ni
el inútil llanto
Ni
el constante anhelo
Ni
el dolor punzante
Ni
el cansado verso
Ni
el deseo. Ni la vida. Ni la muerte.
Ni
la oscura nada
Es
suficiente.
De
haberlo, el consuelo huyó
Contigo
a ese ignoto Eterno
Que
ahoga en cruel agonía
Cualquier
recuerdo.
Esprecetá.................ESTO SE AVISA ANTES...¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡.........AQUI, UNA SEGUIDORA, Y PIERDE VERGUENZA
ResponderEliminarGracias, amiga "anónima". EL PRIMER COMENTARIO A UNA DE MIS ENTRADAS!!!
ResponderEliminarMe acabo de venir arriba. De aquí al Nobel me queda un pasito.
Un cálido saludo y gracias de nuevo. Así cojo brío en un tris.
"Ni la oscura nada
ResponderEliminarEs suficiente."
El dolor y la belleza .Rotundos .Impecables.
Recién te encuentro .Un placer leerte!!!
Un abrazo, Esprecetá.